Una Lágrima en la Oscuridad
por el Gnomo del Pergamino.
Capitulo 6.- Un incidente terrible.
La horda de Olbaid llegó y arrasó con el poblado. Decenas de muertos y heridos fué el saldo final. Continuaron al sur. El avance era muy lento, debido a la enorme cantidad de mercenarios, bandoleros, proscritos, oportunistas, colados demás seres que lo acompañaban en su voraz conquista de Céfiro. No había nadie que lo pudiera detener. Nadie.
Imadia, Zagato
y Molix llegaron al desierto. La árida extensión amarilla
abarcaba todo lo que la vista podía ver, de extremo a extremo en
el horizonte. De una soledad aplastante y tal vez un poco de amargura.
—Es una vista
muy melancólica...—Exclamó Imadia, Molix y Zagato no pudieron
estar más de acuerdo.
—¿No
hay otra manera de llegar allá?—Preguntó Zagato, el sólo
pensar en cruzar ese infierno, le ponía la carne de gallina.
—No. Recuerden
lo que les dije: cuiden el agua. La que traen es la única que verán
en mucho, mucho tiempo.—Imadia y Zagato como no quiere la cosa, apretujaron
las cantimploras contra sus cuerpos. Nova aulló.
—Creo que
Nova no quiere que vayamos en ésta dirección.
—¿Desde
cuando entiendes lo que dice ese perro?—Le preguntó Imadia tratando
de molestar a Zagato.
—No lo sé,
de pronto lo que "dice" me parece muy claro.
—Y tampoco
quiero que hablen, ahorren energía.—Dijo Molix más que nada
para ya no escucharlos.
—Lo que digas
Molinex.
—Te he dicho
mil veces que mi nombre es Molix.
El trío
junto con el extraño animal se adentró en el desierto. A
las pocas horas, ni el mismo Molix esperaba tal infierno.
—¡Rayos!
De haberlo sabido mejor rodeamos ésta porquería...
—¡QUEEE!—Exclamaron
tanto Imadia como Zagato.—¡¿¿pudimos haberlo rodeado??¡
—Bueno, pensé
que sería buen entrenamiento cruzarlo.
—¡Muy
bien! tomémoslo con calma, todavía estamos a tiempo de regresar—Dijo
Imadia usando un tono tranquilizador y por supuesto Molix y Zagato se le
quedaron viendo ¿Desde cuando era tan sensata?.
—¿Recuerdan
el camino?—Dijo Molix.
—No, pero
no importa, sólo seguiremos nuestros pasos y...¿Donde rayos
están nuestros pasos?—Dijo Imadia.
—Pues...—Quiso
decir algo Molix pero se interrumpió...
—¡Pues
qué...!—Le replicó enojado Zagato.
—Pues...Borré
las huellas...era para evitar que nos siguieran....
—No me di
cuenta cuando las borraste...—Dijo Imadia
—Usé
el hechizo de...
—¡Hechizo!
¡Eso es!—Exclamó de pronto Zagato interrumpiendo a Molix.—Creo
que ahora si me permitirás usar los potros de fuego.
—No, no puedo
permitírtelo.
—¡Pues
no me importa lo que digas, yo lo haré!—Zagato se concentró,
extendió las manos y...no pasó nada...—Huh, ¿Que sucede?
—Nunca podrás
hacer los potros de fuego, ni cualquier hechizo de transportación.
—¿Pero
por qué no?
—Guruclef
te implantó un hechizo de anulación.
—¡¡¡¡QUEEEE!!!!
¿pero porque hizo tal cosa?
—¡A
mi no me eches la culpa! ¡fue cosa de él...!
—¡Miren,
es Nova! ¿Que está haciendo?
—¡Creo
que encontró algo! ¡Sigámoslo!
Nova era demasiado
rápido para ellos, así que pronto se les perdió de
vista entre las arenosas dunas, pero pronto le dieron alcance ya que se
detuvo en lo alto de una Duna. Al llegar hasta arriba, semi-oculto entre
la arena, encontraron un extraño objeto, de hecho era UN ENORME
objeto, lo que sobresalía entre la arena tenia como 10 metros de
alto, por unos 100 de largo, tal vez más. Se acercaron al objeto,
a la distancia hubiera sido imposible verlo, incluso desde el aire, por
la gran cantidad de arena que tenía encima y por lo que parecía,
tenia mucho tiempo ahí.
—¿Que
es eso?—Preguntó Imadia.
—No sé,
jamás había visto algo así—Contestó Molix
—Ni yo—Dijo
a su vez Zagato.
—Pues...si
me preguntan a mi, esto parece una nave espacial...—Dijo Imadia.
—¿Una
nave...qué?
—Nave espacial,
como la de las películas...
—Ya no uses
términos de tu mundo, sabes que no conocemos nada de eso...
—¡Precisamente,
eso quiero decir!, está es una nave de otro mundo, es por eso que
no la conocen...
—¿De
Mundo Místico...?
—No de mi
mundo, de otro mundo.
—Estás
loca, solo existen dos mundos: Céfiro y Mundo Místico.
—¿Y
todas las estrellas que se ven en el cielo? ¿que creen que son?
¿Luces de Navidad?—Tanto Zagato como Molix se miraron uno al otro,
no entendían ni media palabra de lo que Imadia decía, aunque
ya estaban acostumbrados.
—Como sea,
busquemos un lugar en ésta cosa donde protegernos del sol, cuando
baje un poco, continuaremos con nuestro camino.
—Bien pensado,
debe haber un hueco por aquí, tal vez una puerta para meternos al
interior
—¿Puerta?—
dijo Molix
—Ustedes solo
síganme el rollo.—Refunfuño Imadia. Sin decidirlo se
separaron para encontrar mas rápido el hueco.
De hecho quien
encontró una puerta fue Nova e incluso la abrió. Como se
habían separado, Imadia estaba cerca cuando Nova la abrió
y pudo observar como lo hizo, utilizando una energía parecida a
la electricidad cortocircuitó la tablilla de acceso. Imadia se le
acercó y le dijo:
—Veo que no
eres un perro común y corriente, tal vez hasta me entiendas, si
es así inclina la cabeza...—Nova la observó durante un instante,
luego inclinó la cabeza, Imadia se sorprendió.—¡Asombroso!
Y dime... ¿Es cierto que desayunas niñas bonitas como yo...?—Nova
negó con la cabeza—¡Lo sabia, ese Dórido me engañó!—Se
interrumpió por que justo en ese momento escucharon un ruido en
el interior. Nova gruñó.
—¡Escuchaste
eso!—Nova volvió a gruñir en respuesta.—¿Entramos
o mejor esperamos a los demás?—Tal vez como respuesta, Nova ingresó
al interior. A Imadia no le quedó más remedio que seguirlo.
Entraron y de momento no vieron mucho, al menos Imadia. Las luces no estaban
encendidas y por que venía de afuera su vista no estaba acostumbrada
a la oscuridad. Aunque el lugar se alcanzaba a iluminar un poco con
la luz que entraba por la puerta. A los pocos minutos vio perfectamente,
Nova se había alejado sin que ella se diera cuenta y ya no estaba.
El lugar no era muy diferente a como se lo había imaginado, como
salido de la película Aliens, volvió a salir para buscar
con la vista a Molix y a Zagato, pero no había ni señas de
ellos, supuso que se habían metido en algún recoveco para
dormitar y descansar. Volvió a entrar. Ese cuarto era pequeño,
tal vez alguna cámara de acceso al espacio, aunque no vio ningún
traje espacial por ahí. A los costados había dos puertas
y ambas estaban abiertas, Nova debió haber tomado alguna. Sin saber
por qué, tomó el del lado izquierdo. Era un largo corredor.
Y al final había luz. ¿Por que no había luz precisamente
en la sección por la que habían entrado?. Imadia se meció
de un lado a otro, indecisa de tomar el corredor o de regresarse y de buscar
a Molix y a Zagato. Casi sin proponérselo, empezó a caminar
por el corredor. Ella misma sabía que hacer algo así era
una tontería, sin embargo debía hacerlo. No sabía
por qué. Sólo debía hacerlo. A medida que avanzaba,
el corredor se iluminaba mas y más. La escasa luz artificial
creaba extrañas formas de sombras de los fierros y tubos que sobresalían
de las paredes y los techos. Ella caminaba muy despacio, atisbando en cada
sombra, le parecía que en cada una de ellas, había algo escondido,
listo para saltar y hacerle ver que sus peores pesadillas eran cosa
de niños. Su corazón empezó a latir apresuradamente,
el miedo empezaba a inundarla, justo a la mitad del corredor, cuando estaba
por dar media vuelta y regresar, una puerta que no había visto antes,
a su costado derecho se abrió. Debido al silencio absoluto que imperaba,
el ruido que hizo la puerta al abrirse la hizo dar un brinco a la pared
del lado izquierdo recargando su espalda con un tubo que corría
desde el suelo hasta el techo, estaba helado. La habitación al otro
lado de la puerta estaba por completo iluminada. Y no había señales
de vida. Imadia se acercó y asomó la cabeza, vigilando la
puerta que no fuera a cerrarse justo en su pescuezo. Comprobó que
no había nadie. ¿Quien había abierto la puerta?. Todo
eso ya no le estaba gustando nada, sin embargo ¿por que quería
seguir investigando? ¿Donde estaba Nova?. Demasiadas interrogantes
y ninguna respuesta. Entró a la habitación. En cuanto su
segundo pie se posó en el piso de la habitación, la puerta
se cerró. Ella volteó sobresaltada. —¡Al demonio!—
pensó, regresaría con los otros, intentó abrir la
puerta jalándola con las manos, cuando pasaron sus 3 segundos de
estupidez, entonces sí busco el interruptor al costado de la puerta
en la pared. Presiono todos los botones, pero no pasó nada. La puerta
no se movió un centímetro. Al otro lado de la habitación
otra puerta se abrió. ¿Ella la había activado?. Al
ver que no podía hacer nada con esa, fue hacia la otra. Tal vez
rodeándola llegaría de nuevo al corredor. Justo al cruzarla
y cerrarse detrás de ella, comprendió su error. Ahora no
había ninguna duda. Algo o alguien la estaba llevando a algún
lugar, sin siquiera forzarla. Escuchó un ruido, volteó pero
no vio nada. Tal vez era Nova, pero lo dudaba mucho. Una voz que pareció
más a la de las ardillas salió de su boca:
—Nova,
jmm, jmm—Se aclaró la garganta y ya con una voz un poco mas fuerte
repitió—Nova ¿eres tu?—Silenció absoluto. Algo se
deslizó a su costado izquierdo, ella volteó pero no alcanzó
a ver que era, su corazón le dio un vuelco, la cosa se movió
de nuevo....Ahora si la vio....y no era Nova.
Fuera de la nave, Zagato y Molix yacían recostados en la arena bajo la sombra que formaban los diez metros de altura de la nave, indudablemente enterrados debían haber otros 40 o 50 metros. Ambos, empezaron a notar la ausencia de Imadia.
—¿No
crees que ya tardó bastante? Recuerda la vez pasada—Dijo Zagato
ya un tanto preocupado.
—Se que esa
chica es un imán para los problemas, pero ¿quien se atrevería
a atacarnos en éste infierno?, ni siquiera Alviclef lo haría,
créemelo.
—Me sentiré
más tranquilo si la buscamos
—Está
bien, vayamos—Molix incorporó con alguna dificultad su enorme corpulencia,
fueron a donde debía estar Imadia y vieron la puerta abierta.
—¿Que
es eso?
—Parece un
acceso, tal vez Imadia tenía razón. Y ésta cosa es
lo que dijo que era...
—Odiaría
admitirlo.—Dijo Molix frunciendo el ceño. Entraron a la nave.
—Que extraño,
Imadia se fue por acá y Nova por allá...¿por que se
habrán dividido?—Imadia en su nerviosismo no se fijó en el
rastro de arena dejado por Nova, y tomó la otra dirección.
Y ella también dejó un rastro de arena.
—¿A
donde vamos?—Preguntó Molix, aunque la respuesta era obvia.
—A buscar
a Imadia, Nova sabe cuidarse solo.—Se adentraron en el corredor y...cruzaron
de largo sin ver la puerta por donde había ingresado Imadia...
Nova olió al extraño, estaba cerca, tal vez al otro lado de la puerta, acercó su cabeza al interruptor y formó un arco de energía. La puerta se abrió. El extraño puso una cara de asombro y corrió, Nova salió detras de él, sin ninguna dificultad lo alcanzó y lo derribó, le iba a asestar una mordida cuando vio su rostro, de inmediato se detuvo, inclinó un poco la cabeza un poco confundido y se alejó. ¿ Era Zagato ?...
Imadia le tiró un golpe con la espada a la cosa, pero erró y golpeó el suelo, levantando algunas chispas, debido a que no había sostenido fuertemente la espada sintió calambres en las manos y la soltó. La cosa dio un salto y le golpeó la cabeza, ella cayó al suelo aturdida. De reojo observó como la cosa venia de nuevo hacia ella, estiró la mano y tomo la espada. Espero justo el momento en que la cosa saltó y...Esta vez le dio de lleno, la partió en dos, ambas partes emitieron un olor putrefacto que le causó nauseas a Imadia. Una puerta se abrió. De inmediato comprendió que eso sólo empezaba....
Zagato y Molix llegaron al final del corredor, había un puerta pero estaba cerrada. Zagato intentó abrirla sin éxito, iban a dar media vuelta para regresar, cuando la puerta se abrió. Molix felicitó a Zagato, quien lo vio desconcertado, él no había hecho nada. Cruzaron la puerta...
El chico miraba asustado a Nova, y Nova se dio cuenta que no era Zagato, a pesar de que era idéntico a él. Una extraña sensación invadió a Nova, la misma que había sentido cuando ingresaron a ese desierto, algo estaba por suceder. De inmediato corrió de regreso dejando a un desconcertado muchacho. Al ir corriendo, Nove perdió un poco de control sobre el flujo de energía de su cuerpo y las paredes del corredor se arañaron con sus rayos. Buscó el olor de Imadia. Lo encontró y fue tras ella.
Imadia se acercó
a la puerta con la espada en la mano, muy despacio. Algo indefinible la
atraía. De pronto una especie de neblina negra la rodeó,
movió la cabeza en todas direcciones buscando el origen, pero no
vio nada, entonces una enorme presión estrujó su cuerpo.
Dio un grito de dolor, de nueva cuenta la espada cayó de sus manos.
El abrazo mortal de esa extraña neblina negra era terrible, cerró
los ojos esperando que todo terminara, en ese momento la presión
se liberó y ella cayó al suelo de rodillas, levantó
la vista y fue entonces que observó el origen de la neblina, un
extraño cristal negro que flotaba a la altura de su cara, pequeño,
del tamaño de un lápiz y la neblina salía de él
como una extensión, algo así como una medusa marina con su
largo manto. Imadia comprendió que ese cristal tenía un fuerte
poder de atracción, ó tal vez había algo más
detrás de ese cristal, algo que lo manipulaba. Imadia sintió
extrañas y nuevas sensaciones en su interior, provocadas sin duda
alguna por el cristal negro, y lo peor era que éstas sensaciones
eran malignas, un cosquilleo recorrió su piel, empezando en sus
manos, bajó la mirada y lo que vio la espantó. ¡ESTABA
CAMBIANDO!, ¡Sus manos se estaban llenando de escamas!. Imadia quiso
huir, pero su cuerpo no le obedeció. Entonces una intensa luz inundó
el cuarto, seguido de un chisporroteo y un aullido. El dolor y las sensaciones
perversas desaparecieron del cuerpo de Imadia. Por fin se puedo mover,
volteó a donde estaba el cristal y solo observó humo como
de algo quemado, Detrás de ella estaba Nova.
—¡Como
me duele el cuerpo!—Dijo mientras se abrazaba a ella misma, observó
con alivio que sus manos habían vuelto a la normalidad—Gracias,
me salvaste la vida—Nova seguía Inquieto, sabía que el cristal
maligno no estaba destruido y podía aparecer en cualquier momento—
¿Qué habrá sido eso?—Dijo Imadia mientras se levantaba,
tomó su espada y se asomó por la puerta por la que había
aparecido el cristal y por la que tal vez habría escapado. Su sentido
común le dijo que no lo hiciera, pero en ésta ocasión
no sucedió nada. No había nada del otro lado. Imadia regresó
con Nova.
—Vamos a buscar
a los otros, ya me cansé de todo esto-Nova asintió.
Molix y Zagato
llegaron a una especie de hangar muy grande, en él había
algunas naves individuales, observaron algunas letras escritas en ellas.
—¿Reconoces
el idioma?—Le preguntó Zagato a Molix.
—Me parecen
conocidas, se parece a nuestro idioma, solo que...
—Es idioma
de Autozan...—Dijo la voz detrás de ellos, era el muchacho con el
que se había encontrado Nova, y en cuanto lo vieron, tanto Zagato
como Molix quedaron sorprendidos.
—¡Increible!
Eres idéntico a Zagato—Exclamó Molix, Zagato estaba con la
boca abierta y los ojos cuadrados, el chico tenia el cabello un poco más
corto y la tez mas clara, ademas de una vestimenta sumamente extraña,
pero fuera de eso era muy parecido a Zagato
—Yo también
me sorprendí cuando lo vi. Me llamó Latis
—El es Zagato
y yo soy Molix. ¿aqui vives?
—Eh, bueno,
no vivo aqui... pero por el momento se puede decir que vivo aqui...
—Estamos buscando
a una chica y a un animal...tal vez los viste...
—Vi al animal,
que me dio un buen susto por cierto... pero no he visto a ninguna chica...
—¿Conoces
bien éste lugar?, tal vez nos puedas ayudar
—Pues...si
lo conozco, solo que...
—¿Hay
algo que debamos saber?
—Creo que
será mejor que les cuente todo—Latis hizo una pequeña pausa,
pensando en lo que iba a decir, luego empezo—Esta nave proviene de Autozan,
un planeta algo alejado de Céfiro, ahí la magia no es tan
común como lo es aquí, sin embargo el poderio se compensa
con una avanzada tecnología, no podiamos acercarnos a Céfiro,
más que en aproximaciones esporádicas, pero por un desafortunado
accidente, ésta nave se estrelló hace muchos años.
Hace algunas semanas, descubrimos la causa de ese desastre. "Algo" se apoderó
de la nave.
—¿algo?—Preguntó
Zagato.
—Aún
no se que es, hace tres dias revisé las bitácoras, y de acuerdo
a los últimos reportes de la bitácora de navegación,
esa cosa se empezó a apoderar de cada uno, transformandolos en bestias
y las bestias mataron a su vez, a los pocos que no se conviertieron.
—Nada en Céfiro
posee un poder así.—Dijo Molix, observando atentamente a Latis.
—Tampoco en
Autozan.—Respondió el.
—Una pregunta
¿naciste en ese planeta...Autozal?...
—Autozan,
No, en realidad nací aqui, por eso me enviaron, me llevaron a Autozan
cuando era muy niño. Tenia 4 o 5 años años ¿Por
que lo preguntas?
—Por nada...continua—Molix
recordó algo, pero se lo guardó no era el momento para sacarlo
a la luz...
—Creo que
esa cosa es de otro planeta y por lo que veo es muy peligrosa, se apodera
del alma y cuerpo de las personas y los tuerce hacia el mal...
—¡Un
momento!—Intervino Zagato—¿Crees que esa cosa ande por aquí?
—No lo sé,
en las semanas que tengo aqui no he visto nada...
—Pero hay
la posibilidad de que esté en la nave...
—No sé
como sea, si se puede desplazar o no, pero algo es seguro, cuando llegué
todas las puertas estaban selladas, ninguna estaba forzada.
—Entonces
debe seguir aqui.
—Bah, si no
es de Céfiro, no será rival para nosotros...—Dijó
Molix
—Ustedes no
entienden, la élite de la armada de Autozan venía en ésta
nave, y ellos no pudieron hacer absolutamente nada, y tambien hay otra
cosa que descubrí, yo por ser originario de Céfiro puedo
dominar magia, y...
—¿y...?
—Intenta un
hechizo, el que sea...—Zagato intento una pequeña daga de hielo,
pero la daga jamás apareció a pesar de que zagato hizo varios
intentos, despues trató uno bastante sencillo, tampoco lo pudo hacer.
—No entiendo...
—Lo suponia,
tampoco puedo hacer magia, al parecer hay un campo que se extiende por
toda la nave, que inutiliza la magia...
—¿Crees
que sea provocado por esa cosa?
—Es lo más
seguro
—Será
mejor que busquemos a Imadia, puede correr peligro
—El animal
se fué por esa direeción, tal vez fué con ella.
—Entonces
vamos, no hay tiempo que perder...—Salieron al oscuro corredor y de la
puerta a la mitad salió una Imadia tambaleante acompañada
de Nova, de inmediato se dieron cuenta no estaba bien y corrieron a auxiliarla
—¡¡Imadia
!! ¿Que pasó?
—Yo-o...—Imadia
se desmayó, Latis la alcanzó a atrapar en el aire. Zagato
se quedó a medio camino, con los brazos extendidos y frunciendo
el ceño un poco, tal vez por que Latis tenia en sus brazos a Imadia
o tal vez por que había sido más rápido que él.
Algunas horas después, Imadia recobró el conocimiento, aún
un poco adolorida de su encuentro con el cristal negro, sin saber porqué
ocultó el cambió que experimentó en sus manos. Tambien
se asombró del parecido entre Zagato y Latis.
—Vaya, casi diria que son hermanos—Le
dijo a Latis, éste acostumbrado a ver cosas extrañas, al
igual que Zagato, no le pareció rara la afirmación de Imadia,
aunque no le dió importancia, las probabilidades de que fueran hermanos
eran 1 en un billón.
Decidieron partir al amanecer. Llevando
unas raciones extras de agua y comida que Latis les cedió, en la
nave había la suficiente para que Latis viviera con tranquilidad
algunas semanas más, él quedaría ahí para encargarse
del maldito Cristal Negro.
IMPORTANTES y larguisimas Notas del autor o sea yo.-
Este capítulo
es un poco diferente a los otros, pero hay muy buenas razones para que
así sea.
Cuando inicie ésta historia tenia una cosa en
mente y no tenia pensado para nada la saga de Imadia, que se me ocurrio
hasta el capítulo 2. Luego con la saga de Imadia me ocurrió
lo contrario, olvide por completo los capitulos 1 y 2, por que me compenetre
más con la saga de Imadia y por que pasaron muchas semanas desde
que escribi los capitulos 1 y 2, que no los había leido para nada
hasta hace unos 3 dias, entonces, para respetar y regresar a los
hechos que había establecido en los capitulos 1 y 2, tuve que escribir
este capitulo 6, a continuación doy una explicación más
amplia de lo que sucede en éste capitulo:
Parto de la
base que a Latis(hermano de Zagato) lo secuestraron los extraterrestres
cuando era un niño (en este caso los extraterrestres o mejor dicho
los extracefirianos son los de Autozan, pensaran que lo pense viendo un
capitulo de los Expedientes X, pues sí, de ahí se me ocurrió)
y a ambos les ocultaron éste hecho, Molix se dió cuenta,
pero no le dijo nada, aunque algun tiempo después ambos se enteran
de la verdad. Latis se queda en Céfiro por muchos años y
antes de la llegada de Lucy, Marina y Anais, él regresa a Autozan,
pero por otras razones.
Ahora ya conocen
el origen del Cristal negro(desde mi punto de vista, claro). En realidad
es una entidad extraterrestre de un planeta desconocido, cuyo poder consiste
en deformar el alma y el cuerpo de las personas, hacia el mal y anular
la magia de cualquiera. En éste capitulo el cristal es muy joven
y su poder no es mucho, pero a medida que pasan los años crecerá
y se volverá tan grande y poderoso, tal y como lo vimos en la serie
o en el capitulo 1 y 2 de ésta historia (para los que no han visto
la serie). Latis nunca lo encuentra. Lo busca infructuosamente por
algunas semanas más, finalmente se da por vencido y abandona esa
nave para dejarla en el olvido. Y el cristal de alguna manera llega al
bosque del silencio. ¿Por que el cristal nunca lo atacó a
él? es un misterio que continua hasta la fecha.
La cosa que
atacó a Imadia antes de que el cristal lo hiciera, pudo haber sido
el último tripulante que quedaba con vida, convertido en bestia.
Los otros debieron matarse unos a otros o tal vez murieron de hambre o
de sed, quien sabe (eran demasiado idiotas como para activar el procesador
de comida).
Tambien tenia
que establecer el origen de la caida de Imadia en el lado de la maldad
(Sonó como a Darth Vader) Y éste incidente, aparentemente
sin importancia fue la causa. Muy en lo profundo de su corazón quedó
un remanente, un punto negro de maldad dormido, inerte. Sólo esperando
el momento ideal para despertar y apoderarse de la voluntad de Imadia.
Pero sólo sucederá si Imadia algún dia flaquea y pierde
la confianza en si misma y sobre todo la confianza en sus amigos y seres
queridos.
Las naves
de Autozan solo podían acercarse esporadicamente a Céfiro
cuando no había Pilar que con su magia protegía a Céfiro
de tales acercamientos, y la nave que se estrelló fué por
que El Cristal Negro anuló la magia que protegía a Céfiro
aún cuando en ese entonces si había Pilar.
Hasta ahora
he respetado fielmente los hechos de la serie (salvo algunas metidas de
pata involuntarias, agradezco a Jose Luis una aclaración), es decir,
no he puesto nada que la altere en su más mínima forma y
tampoco he puesto nada de los OVAS. Pero no puedo resistir la tentación(sera
por que tomé manzanita sol), por lo que tal vez agregue alguna situación
que cambie definitivamente el curso de la serie, o alguna cosilla de los
OVAS.
Despues de
éste melodramático capítulo y las un tanto extensas
notas de autor nos vemos en el siguiente capítulo.
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