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El seis de Junio del año pasado, se estrenaba la nueva producción de Pioneer LDC. Con tan solo 13 episodios de unos 25 minutos de duración cada uno y avalada por los nombres de los diseñadores de personajes Yoshitoshi Abe y Takahiro Kishida (director de animación de Tenchi-Muyo in Love y director de arte de Dragon Half) y del director de animación/guionista Chiaki J.Konoka (guión de Armitage III), Serial Experiments Lain se presentaba como un anime atípico... experimental, pero igualmente esperado por el público. Asemejada por algunos a Perfect Blue (Satoshi Kon, 1997), encontramos un thriller futurista dirigido por Ryutaro Nakamura donde lo que prima es la tensión y el suspense. También se ha dicho que tiene puntos en común con Neon Genesis Evangelion, y es cierto, Lain aborda al igual que el anime de Gainax el tema de la realidad interior de cada persona, mediante el constante psicoanálisis de la protagonista. Pero... ¿de qué va todo esto? Bien... a ver como os lo cuento.
Lain es una chica de 14 años muy introvertida, y según sus propias
compañeras, poco "adulta". Según la voz que escuchamos al principio de cada
episodio, "hoy y ahora", llega a clase y encuentra llorando a una chica. El
motivo de su llanto es un e-mail que le han enviado -y no solo a ella- probablemente unos
bromistas, haciéndose pasar por Chisa Yomoda, una chica de la clase D que se suicidó la
semana pasada. Sus amigas le aconsejan que compruebe el correo cuando llegue a casa, y eso
hace; en efecto, Lain también ha recibido el mensaje de Chisa. Pero no parece que sea
obra de bromistas. En el e-mail, Chisa le dice que aunque ya no conserva su cuerpo, no
está muerta y que aunque ahora no lo comprenda, lo comprenderá... al igual que todos los
demás. Después de este suceso, Lain comienza a interesarse en la Wired (el
mundo paralelo, creado por las redes de comunicación) y los Navis (los
ordenadores del futuro). Hasta el punto de convencer a su padre para que le compre uno
nuevo, más potente, al que equipará con el misterioso procesador de psique. A todo esto
hay Como veis, no es moco de pavo, y no sabéis lo difícil que me es resumir en unas pocas líneas los primeros episodios, ya que estos crean un complejo entramado de confusión que no nos es rebelado hasta el final. Lain emprenderá un difícil camino que le conducirá a si misma y el lugar que ocupa en la realidad. Acompañadla, el viaje merecerá la pena aunque eso si, os aviso de que si Evangelion se volvia rara y paranoica entorno a los últimos episodios, esta lo hace nada más empezar. La mayoria de las cosas que se mencionan en la serie no son nuevas, si no que más bien tratan de construir una síntesis de los elementos antiguos ofreciéndonos una aproximación completamente nueva. Las redes de comunicación, los protocolos, la resonancia Schumann, todos son conceptos reales que se entrelazan en Serial Experiments Lain formando una maraña de dimensiones gigantescas. En mi humilde opinión, esta serie es sin lugar a dudas, uno de los mejores títulos editados en Japón durante el 98. Ahora tocaría decir lo que en mi artículo para la revista Dokan, es decir el texto de donde surgió esta página: "por suerte cuenta con bastantes papeletas para que lo podamos ver por estos lares (y más pronto de lo que pensáis) ya que Pionner comenzó a editarla en los EEUU el pasado 13 de Julio y toda la crítica coincide en que gozará de un éxito equiparable al de Evangelion." Bueno, pues no me equivocaba en absoluto y ya podéis verla en castellano de la mano de Selecta Vision, no sin soportar algún que otro fallo de traducción y dicción por parte de los dobladores. Así como que no editen las cintas como se está haciendo en los Estados Unidos; es decir, en lugar de colarnos tres cintas con tres episodios y dos con dos, venden una con cuatro y tres con tres.
"...estén donde estén, todas las personas están conectadas." |
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